Lip Bu Tan ha visitado la Casa Blanca y acuerda colaborar con Estados Unidos para impulsar la fabricación de semiconductores local

Hoy mismo hemos conocido como la administración Trump ahora cobra por la exportación de productos para IA a China, esto incluye a NVIDIA y AMD con sus respectivas H20 y IM308. Una guerra contra China en la que también se ha visto involucrada Intel, la compañía estadounidense de fabricación de semiconductores, que cuenta con un nuevo CEO acusado de invertir en una gran cantidad de empresas del país asiático del que es rival tecnológico Estados Unidos.

Pero Lip Bu Tan, actual CEO de Intel, ha visitado la Casa Blanca ayer mismo para tener una extendida conversación con Donald Trump, y arrojar un poco de luz sobre sus inversiones. Una postura en la que incluso ha dado la vuelta a la junta directiva de Intel posicionándose en contra de Tan. El CEO de Intel quiere exponer a Donald Trump, que tanto él como la compañía están de acuerdo en su expansión e inversión en terreno estadounidense para la construcción de una cadena de suministro local, a la vez que tienen que despreocuparse de problemas de seguridad nacional.

Por otra parte, Tan ha sido presidente de Cadence, quien ha sido acusada de vender secretos comerciales a China, y también ha realizado inversiones en multitud de empresas chinas incluidas algunas vinculadas con el ejército del país asiático. Pero Tan ha discutido con el presidente sobre nuevas colaboraciones entre ambos para fortalecer la cadena de suministro local y fabricación de semiconductores en Estados Unidos.

Intel está en unos años malos, la compañía va en caída, y una negativa por parte del gobierno de Estados Unidos que ha estado ofreciendo ayudas para invertir en suelo estadounidense, puede verse reflejada en incrementar sus malos resultados de los últimos meses. Estas conversaciones también han tenido lugar entre medias de la finalización del acuerdo de prórroga de exención arancelaria entre Estados Unidos y China.

Unas conversaciones que parece haber dado sus frutos donde Intel y el gobierno de Estados Unidos colaborarán para impulsar de nuevo la fabricación de semiconductores en Estados Unidos. Parece que la próxima semana comenzarán a sugerir opciones fruto de una reunión entre Intel y el gabinete del presidente.

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