El 20% de sus nuevos ingenieros de IA de Google son antiguos empleados que han decidido volver

La guerra por el talento en el sector tecnológico ha dado un giro estratégico en 2025. Según datos revelados por la CNBC, Google está nutriendo sus filas de expertos en inteligencia artificial recurriendo mayoritariamente a caras conocidas. Aproximadamente el 20% de los ingenieros de software especializados en IA contratados este año son "empleados bumerán", un término habitual que se refiere a aquellos trabajadores que abandonaron la empresa en el pasado y ahora regresan a ella.

Un portavoz de la compañía ha confirmado estas cifras, señalando además un aumento significativo en la llegada de investigadores procedentes de rivales directos en comparación con el año anterior. La razón principal de este retorno parece ser la capacidad técnica inigualable del gigante de Mountain View. John Casey, jefe de compensación de Google, ha explicado internamente que los ingenieros se sienten atraídos por los recursos financieros de la empresa y, sobre todo, por una infraestructura computacional masiva que resulta indispensable para entrenar y ejecutar los modelos de vanguardia actuales.

De los despidos masivos a la caza de talento personal

Paradójicamente, la gran reserva de talento de la que ahora se beneficia Google se formó, en parte, tras los recortes históricos de principios de 2023, cuando Alphabet despidió a 12.000 personas. En un mercado laboral caldeado por competidores como OpenAI, Anthropic y Meta, que luchan por cada fichaje, Google está jugando la carta de la estabilidad y los recursos ilimitados frente a la incertidumbre o limitaciones técnicas de las startups.

La agresividad en la contratación ha llegado a las esferas más altas de la corporación. Según fuentes cercanas, el cofundador Sergey Brin ha contactado personalmente a candidatos clave para convencerlos de unirse al equipo, una táctica similar a la utilizada por Mark Zuckerberg en Meta. Este movimiento se suma a retornos de alto perfil, como el de Noam Shazeer, quien volvió a las filas de DeepMind tras su paso por la startup Character.AI. Mientras la competencia ofrece bonos de firma millonarios, Google apuesta por su renovado impulso con productos como Gemini 3 para atraer a los mejores ingenieros de vuelta a casa.

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